miércoles, 11 de marzo de 2009

Restaurante Corte Ingles

Hace tiempo que lo conozco por referencias de amigos y conocidos, siempre buenas. Desde hace tres o cuatro años lo visito y solo puedo dar buenas opiniones.
Situado en el último piso del edificio, al lado del bar y cafetería donde come mucha gente.
El restaurante, muy amplio, cómodo y funcional no suele estar muy concurrido. Dispone de un reservado que puede dividirse en dos.
Los camareros son, como todos los empleados del Corte Inglés, amables y competentes.
El arroz con bogavante, negre, paella son una especialidad tradicional y que suelo pedir. El arroz lo dejan al punto, estupendo para mi gusto. El bogavante lo ves entero.
El jamón suele tener una calidad apropiada para el lugar. La ensalada de perdiz no envidia a ninguna, la verdura fresca y no lacia, la perdiz en su punto, quizás le falte un poco de vinagre para el gusto de algunas pero eso tiene remedio porque cada uno puede aliñarse su ensalada con el aceite y vinagre de excelente calidad que está a disposición de los comensales desde el inicio de la comida (no puedo resistirme a echarme un poco de aceite en el plato, mientras espero la comida, y mojar pan recién hecho con el).
Cazuelita de pulpo y gambas en su salsa, una sorpresa deliciosa.
Besugos, sin espinas, para disfrutar de tan delicioso bocado sin el trabajo y lo desagradable de comer un pescado con tanta espina para los que somos quisquillosos en un sitio público.
Cochinillo asado y deshuesado. con su piel crujiente y su carne que se deshace en la boca Hummm.
Tiramisú hecho en la cocina. No le tiene envidia a ningún tiramisú casero.
Renueva su carta con frecuencia. 
Atún a la plancha de calidad excepcional, jugoso. Lástima la reducción de módena caramelizada, en mi opinión se dejaron pasar el caramelo.
Solomillo con foi, muy bien.
Para terminar, una tarjeta de bonificación para el aparcamiento.

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